Muchas veces nos decimos “quiero dinero” y no podemos conseguirlo. El dinero un llueve, el dinero no crece en los árboles, no hay semillas para plantar dinero. Obtenerlo no es nada fácil. Para ganar el dinero, valga la redundancia, hay que ganárselo. No podemos decir “quiero dinero” y obtener todo el dinero que deseamos. ¿O acaso si podemos? Existe un método.
Existe una estrategia, una clave, un secreto, una llave que abre una puerta que lleva a mil puertas. Existe una ley. Existe la atracción. Existe la ley de la atracción. Así es, una ley que nos permitirá atraer todas aquellas cosas que deseemos, que verdaderamente necesitemos para vivir, que nos hagan falta que y que queramos tener. ¿De qué manera funciona esta ley? El funcionamiento de la ley de atracción no es sencillo, es algo a lo que debe dedicarse todo el tiempo de nuestra mente despierta. Es decir, que todo el tiempo, durante todo el día, nuestra mente tiene que estar concentrada.
Supongamos un ejemplo para poder atraer el dinero. Lo que necesitamos es dinero, queremos dinero para hacer determinada cosa, para viajar a determinado lugar. Para poder lograr atraer el dinero necesitamos concentrarnos. Día a día debemos pensar en atraer dinero. No vamos a atraer el dinero de un día para otro si decimos “quiero dinero” todo el tiempo. Pero debemos imaginar y concentrarnos. Debemos vernos con ese dinero. Pensar en que el dinero viene hacia nosotros. Lo mejor para la ley de atracción es poder pensar en una situación que pueda suceder en la realidad.
Pensarla todo el tiempo, imaginándola como pasa y que de esa manera el dinero viene hacia nosotros. Por ejemplo, podemos pensar que una gran oferta de trabajo viene hacia nosotros. Que comenzamos a trabajar y comenzamos a tener un buen sueldo. Con ese buen sueldo, una parte la destinamos a los gastos diarios y otra parte la ahorramos.
De esa manera comenzamos a engendrar una gran fortuna. La ley de atracción no se realiza de un día para otro. Lleva su tiempo. Uno no se dará cuenta de los cambios al principio, pero pasará un tiempo y se dará cuenta que lo que sucedió era lo que estaba atrayendo con su mente.
